En los años de existencia del arte, su desarrollo y expansión se ha venido modificando, debiendo evolucionar para mantener su auge, con la llegada del siglo XXI, y la evolución de los diferentes sectores sociales y culturales, ha derivado que el arte ha debido modernizarse y ampliar sus corrientes para mantenerse actualizado.
Tres principales derivantes del arte del siglo XXI, las enmarca la Instalación, el performance y el arte móvil, corrientes que cumplen junto a las demás artes actuales con los elementos básicos de irreverencia, alto contraste y alternatividad.
¿Cuántas veces hemos visitado el centro comercial Metrocentro?, ¿En cuantas ocasiones nos hemos acercado para hacer alguna compra, realizar un trámite o simplemente para cambiar la rutina?.
Pues en ese concurrido centro comercial, de los mejores de la región, existe un claro, quizá el mejor ejemplo del Arte del siglo XXI “la Instalación”, pues en la intersección del bulevar de los Héroes y la calle los Andes, cinco letras que aducen el centro comercial, con la abreviatura con el que las personas popularmente lo conocen y que acorta su nombre oficial METRO.
Las letras de aproximadamente 3 metros, pintadas de rojo, pertenecen a la INSTALACION, ya que fue elaborada con materiales industriales, los que sobraron de la construcción de una etapa nueva del lugar.
Otro claro ejemplo de la Instalación lo encontramos en China, en el Estadio Olímpico, conocido como el Nido, ya que su estructura fue edificada con vigas entrecruzadas, que al igual que METRO, utilizaron materiales industriales para su construcción.
Siempre dentro de las artes del siglo XXI, encontramos el performance, corriente artística que tuvo su auge en los años 90, y que representa una muestra escénica, en ocasiones se encuentra presente la improvisación, factor que contribuye y que caracteriza a la corriente, ya que provoca asombro y admiración entre los presentes.
Para realizar el performance, debe haber publico que aprecie el momento justo en que se está creando la obra, Marlon Díaz, conocido artísticamente como Maco, es un caricaturista que trabaja en vivo recorre playas y centros turísticos para retratar de forma peculiar a sus clientes, donde no falta la presencia del publico que observa y admira su trabajo, la que es una forma de expresar humor de todo tipo.
Una práctica extranjera que ya ha cobrado auge en nuestro país, es el flatland, que consiste en realizar presentaciones y hacer maniobras con una bicicleta, la práctica y el publico hacen que pertenezca al performance, ya que es un arte creante, posee público y las hazañas se realizan una vez.
En nuestro país, además existe la creación de las alfombras en la Semana Santa, en ocasiones, sus diseños originales y particulares le hacen participes de esta corriente, al igual que las esculturas que se realizan con la arena de las playas.
Mientras que el Arte Móvil, es otra expresión artística del siglo XXI, y no es más que objetos cotidianos, que se mueven y deben desplazarse por todas partes y es donde se les ha plasmado un arte peciuliar.
En nuestro país, Renacho Melgar, es un artista que ejecuta mucho el arte móvil, dentro de sus obras figuran carretones de minutas, cajas de lustradores de zapatos, en este medio de expresión le sirve para plasmar su forma particular de plasmar su concepto de arte.
Otras muestras del arte móvil lo encontramos en el transporte colectivo, ya que hay unidades, que mediante la pintura, adornan las carrocerías de algunas unidades, métodos que les da la libertad de poder colocar cuanta cosa se le ocurra ponerle al propietario.
Tanto el performance, la Instalación, y el arte móvil, son corrientes que forman parte del arte del siglo XXI, y que representan una nueva propuesta, un nuevo arte para atraer más artistas y más admiradores, lo cual servirá para en un futuro, atraer mas artistas y lograr de esa forma poder expandir la
cultura.